Foto: Archivo Euskotren/Museo Vasco del Ferrocarril (CALVO, JUAN C.)

A estas tierras a orillas del Deba llegaron los trenes de la mano de la Compañía del Ferrocarril Durango – Zumárraga. Vinculada accionarialmente al FC Central de Vizcaya, que ya unía en ancho métrico Durango con Bilbao, el proyecto se planteaba como la mejor solución para unir Bilbao con San Sebastián, aprovechando para ello el empalme en Zumárraga con la línea de vía ancha de Norte. Era un buen ahorro de kilómetros a toda una línea nueva por la costa, pero la topografía, sobre todo superar el paso de la Deskarga, le imponía al fc de vía estrecha unas rampas y una sinuosidad extrema, que fue causa de mil y un problemas, algunos que derivaron en accidentes con múltiples fallecidos.

Se puso en servicio en 1888, pero al poco del comienzo del nuevo siglo, en 1901 un nuevo actor entró en juego en esta escena: el Fc. de Elgoibar a San Sebastian. Esta empresa, también con mil ligazones empresariales con las otras dos, resolvió por la costa la conexión directa en ancho métrico de las dos capitales vascocantábricas, lo cual mermó parte de la razón de ser de nuestra línea a Zumárraga.

Tantos eran los vínculos entre el Central de Vizcaya, Durango-Zumárraga  y Elgoíbar-San Sebastian, que en el año 1906 las tres empresas se unieron en la más potente Compañía de Ferrocarriles Vascongados. Tras su incorporación llegaron algunas mejoras, como la electrificación, en 1929.

Por otro lado un hecho importante fue que en 1915 se inauguró el FC Vasco Navarro, que supuso la conexión de los FC Vascongados con Vitoria y Estella. El empalme se producía en la estación de Mekolalde, un barrio de Bergara. Y esta conexión le dio mucho tráfico a la línea del Fc. Vascongados, pero el cierre del Vasco Navarro, en 1969, le dio un golpe brutal a sus cuentas, ya tocadas.

Bajo la tutela de Vascongados, la línea de Zumárraga mantuvo su actividad hasta 1971, año en el que se autorizó una suspensión provisional de los tráficos. Un año más tarde toda la red de Vascongados quedó integrada en FEVE, empresa que no recuperó el servicio y, aprovechando otros cierres de líneas en esta zona, la clausuró definitivamente el 1 de marzo de 1975, cuatro años más tarde, iniciándose al poco el desmantelamiento de sus vías e instalaciones.